El CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, expresó su opinión en las redes sociales, señalando que el campo de regulación de criptomonedas en los Estados Unidos podría experimentar un nuevo desarrollo. Indicó que la vicepresidenta Kamala Harris no es ajena al valle de Silicon, y tiene una valiosa oportunidad para abordar cuestiones clave que afectan al sector, incluyendo la formulación de políticas de regulación de criptomonedas más razonables. Aunque mantiene una postura abierta, Garlinghouse también advirtió sobre posibles efectos negativos en el desarrollo del sector si la vicepresidenta toma ciertos posturas políticas, especialmente aquellas relacionadas con factores políticos complejos involucrando al comisionado de la SEC, Gary Gensler.