Jack Mcintyre, de la gestión global de inversiones de Brandywine, argumenta que en el actual estado de la economía, la retirada de Biden alinearía al menos a corto plazo el mercado, siendo especialmente una buena noticia para los inversores en bonos. Añadió que dado que Estados Unidos está atravesando una etapa de crecimiento económico y lucha contra la inflación, un gobierno dividido podría significar menos incertidumbre en las políticas, lo que sería beneficioso para la estabilidad general del mercado. Sin embargo, el impacto a largo plazo aún es objeto de observación en función de la realidad de la implementación de dichas políticas.