Las bolsas de valores de EE.UU. han experimentado una importante venta reciente, con el promedio del índice Dow Jones que ha caído más del 1.6%, el índice S&P 500 ha bajado más del 2%, y el índice de la bolsa de valores Nasdaq ha registrado una caída superior al 3%. Esta serie de movimientos refleja la preocupación del mercado por el futuro económico, especialmente por las preocupaciones sobre una posible recesión que se están intensificando. Los últimos datos de empleo y actividad manufacturera de EE.UU. no son optimistas, con un aumento significativo en los solicitantes de subsidios de desempleo, además del índice ISM de manufactura que se ha situado en 46.8%, muy por debajo del valor esperado, lo que indica que la actividad económica está presentando signos de contracción. En presencia de estas señales negativas, el economista Chris Rupkey señaló que los datos actuales muestran una clara tendencia hacia una disminución económica, incluso si solo son signos de una posible recesión leve. En medio de la volatilidad del mercado, algunas empresas que podrían verse afectadas por una posible recesión, como JPMorgan y Boeing, han sufrido una baja de cerca del 3% y más del 7%, respectivamente. Además, las acciones de grandes empresas tecnológicas como Nvidia también han descendido un 8%, lo que muestra el temor del mercado a posibles mayores volatilidades durante el período electoral de noviembre en EE.UU.