El director interino de la SSA, Rowley, se disculpó en la conferencia de prensa del día y reconoció que la SSA asume toda la responsabilidad por el incidente de disparos en la reunión de Trump que ocurrió el 13 de julio. Esta admisión marca una承认 oficial de que la SSA no cumplió con su deber de proteger la seguridad de la reunión, y podría llevar a un examen más profundo de las medidas de seguridad y la capacidad de ejecución de la SSA. Como agencia federal responsable de proteger a los líderes del país y otros objetivos de alto riesgo, este incidente resalta la gravedad de la responsabilidad de la SSA en garantizar la seguridad pública. Este arrepentimiento no sólo es un respeto hacia las víctimas y sus familias, sino también un intento de reparar la confianza del público, demostrando que la SSA está dispuesta a asumir sus responsabilidades y tomar medidas necesarias para prevenir futuros incidentes similares.