El Jefe del Banco de Reserva de Australia, Philip Lowe, señaló que las expectativas de una bajada de tasas en el mercado pueden ser prematuras, y recientemente, los cálculos de política han estado considerando la posibilidad de subir las tasas para combatir la presión inflacionaria. Dijo que el Banco de Reserva de Australia está monitoreando de cerca los datos económicos y las tendencias de inflación, y está dispuesto a tomar medidas si es necesario. Si el Índice de Precios al Consumidor (IPC) no se ajusta a lo esperado, el Banco de Reserva de Australia podría optar por subir las tasas. Esta declaración de Lowe indica que el Banco de Reserva de Australia está manteniendo una atención extremadamente vigilante a su entorno económico y está preparado para ajustar flexiblemente su política monetaria para mantener la estabilidad económica y alcanzar sus objetivos de inflación.