El co-fundador de BitMEX, Arthur Hayes, expuso en las redes sociales su perspectiva sobre su peculiar situación como un whale de Bitcoin. En público, admitió que no sólo posee una cantidad considerable de Bitcoin, sino también Ordinals, BRC20 y Runes de otras criptomonedas. Este comportamiento ha despertado la atención y el debate en la comunidad de criptomonedas, especialmente cuando estos volúmenes de inversión superan lo que es comúnmente conocido. A menudo, Hayes se ve criticado y burlado por la sociedad. Expresó que aunque su riqueza debería darle felicidad, en realidad le hace sentir despreciado por la sociedad, una emoción contradictoria que forma parte de su vida diaria. Para expresar una actitud cómica hacia este fenómeno, Hayes compara su posesión de la riqueza de Bitcoin con la aceptación de su propia apariencia física. Cita al cantante popular Lizzo que promueve el amor por la diversidad de las formas corporales, destacando que, de igual manera, sea en el cuerpo o en la estructura de riquezas, lo importante es aceptar y celebrar la unicidad. En esta metáfora, la combinación de diferentes criptomonedas en su cartera se compara a una figura física única, que necesita ser positivamente aceptada. Además, Hayes expresó de manera irónica su desconcierto ante la decisión de algunos inversores de criptomonedas de vender sus activos por moneda oficial. Observó que esto es similar a tomar medicamentos para adelgazar y negarse a uno mismo, una traición a su propia riquez y identidad personal. Según él, la verdadera valía radica en la confianza y orgullo que tiene uno mismo por sus activos, no en las críticas externas o los cambios de mercado a corto plazo. A través de estas declaraciones, Hayes no solo revela los complejos desafíos psicológicos que enfrentan los individuos en el mundo de las criptomonedas, sino también anima a más personas a abrazar la diversidad de su riqueza, sin importar cómo se muestre la sociedad.