Un reciente informe de la compañía de seguridad blockchain Halborn indica que a pesar del descenso en la cantidad total de fondos robados en 2023, los ataques de hackers a la Finanzas Distribuidas (DeFi) siguen siendo una de las principales amenazas de seguridad. El informe analizó detalladamente 100 incidentes de ataques de DeFi de mayor magnitud que ocurrieron entre 2016 y 2023, con un monto total involucrado de 7,4 mil millones de dólares. Durante este período, las cadenas Ethereum, Binance Smart Chain y Polygon se convirtieron en áreas de ataque prioritarias para los hackers. El informe señaló que aunque los ataques fuera de cadena, como vulnerabilidades de contratos inteligentes, manipulación de precios y ataques de gobernanza, son más comunes, los ataques fuera de cadena, especialmente el robo de claves privadas, ocuparon el 29% de todos los ataques y causaron el 34,6% de los pérdidas de fondos. Es importante notar que en 2023, los ataques fuera de cadena representaron el 56,5% de los ataques totales, y su porcentaje de fondos robados alcanzó el 57,5%. El informe también destacó que solo el 21% de los protocolos que fueron atacados utilizó una billetera con firma múltiple, la mayoría de los ataques de cadena fueron realizados en protocolos no auditados, y los errores de validación o confirmación internos en los protocolos fueron las principales causas de la explotación de contratos inteligentes. Además, las cadenas de puente siguen siendo el camino principal para que los hackers realicen sus ataques.