En los últimos días, el gigante financiero global Goldman Sachs publicó un informe reciente donde ajustó su evaluación sobre la probabilidad de que la economía de EE. UU. caiga en una recesión. En esta actualización, Goldman Sachs redujo esta probabilidad desde el 25% anterior hasta el 20%. Esta medida demuestra que, a pesar de las numerosas desafíos internos e internacionales, la institución considera que la economía de EE. UU. tiene cierta resiliencia y capacidad para recuperarse. Los analistas de la institución destacaron el fuerte desempeño del mercado laboral, la estabilidad de la confianza del consumidor y el crecimiento continuo de las inversiones empresariales como fundamentos para su predicción. Este anuncio recibió una respuesta positiva del mercado, con algunos inversores interpretándolo como un signo favorable para el futuro del crecimiento económico global.