En su más reciente declaración, el presidente de la Reserva Federal Powell envió claros señales de recorte de tasas al mercado. Indicó que la Reserva Federal planea reducir las tasas para evitar un deterioro adicional del mercado laboral estadounidense y mantener la estabilidad económica y el crecimiento del empleo. Powell enfatizó que la situación económica actual requiere que la Reserva Federal tome medidas para prevenir una mayor caída en las condiciones del mercado laboral. Este planteamiento contrasta fuertemente con la posición de política monetaria anterior, lo cual sugiere que la Reserva Federal podría llevar a cabo una acción de recorte de tasas sin precedentes en la historia. Se espera ampliamente que la Reserva Federal anuncie formalmente su decisión de recorte de tasas en su reunión en septiembre. La declaración de Powell marca el fin de la lucha de la Reserva Federal contra la inflación, en contraste con su postura hace dos años cuando argumentó que estaba dispuesto a aceptar el riesgo de una recesión económica para lograr la estabilidad de la inflación. Sin embargo, esta vez su postura es más firme y clara, mostrando que ya ha obtenido suficientes datos económicos que respaldan su decisión de recortar tasas.