Durante la reunión de Jackson Hole, el discurso del presidente de la Reserva Federal, Powell, enfatizó el papel crucial que juegan los datos de empleo en la formulación de las decisiones sobre la política monetaria futura. Esta declaración ha generado un gran interés en los datos de empleo que se publicarán en agosto, especialmente considerando que los datos de crecimiento de empleo en julio fueron más débiles de lo esperado. El analista de Santander, Stephen Stanley, señala que en este contexto, los datos de empleo de agosto tendrán altas expectativas, pero se espera que su tasa de crecimiento no cambie drásticamente. Sin embargo, es importante destacar que Powell y sus colegas ya están prestando atención a los signos de enfriamiento del mercado laboral. Por lo tanto, si los datos de empleo de agosto muestran un fuerte desempeño, podría tener un impacto en las expectativas del mercado de una reducción de 50 puntos básicos en la tasa de interés el próximo mes. En estas circunstancias, la importancia de los datos de empleo podría superar la relevancia de los datos centrales de IPC en el mismo período, convirtiéndose en uno de los factores principales que los formuladores de políticas consideran.