Según el último informe de Citigroup titulado 'Evolución de los servicios de valores', una investigación que abarca casi 500 instituciones reveló un cambio en la actitud de las instituciones financieras globales hacia el uso de monedas digitales emitidas por el banco central (CBDC) para la liquidación de activos digitales. Los datos muestran que el año pasado, un 52% de las instituciones afirmaba tener planes o estar utilizando CBDC para liquidaciones, esta cifra ha disminuido significativamente al 15%, lo que indica un considerable debilitamiento del interés de las instituciones financieras en CBDC. Al mismo tiempo, las instituciones muestran un mayor interés en otros métodos de pago digitales como estables no bancarios, depósitos tokenizados y fondos de mercado monetario tokenizados. Estos cambios reflejan cómo los participantes del mercado financiero están explorando una gama más amplia de opciones de pago digital para adaptarse a las tendencias en constante evolución de la tecnología financiera. El estudio también revela que, aunque Norteamérica lidera en la validación conceptual de CBDC, no hay proyectos comerciales de CBDC hasta ahora. Por otro lado, Europa y América Latina muestran un progreso más concreto en proyectos reales, lo que indica que el ritmo y el enfoque del desarrollo de CBDC varían según la región geográfica. A medida que los activos tradicionales y digitales se integran más profundamente, las instituciones financieras buscan soluciones más eficientes y convenientes para liquidaciones y pagos. En este contexto, las soluciones automatizadas, la infraestructura en la nube y las integraciones con redes de contabilidad distribuida (DLT) se convierten en focos de inversión futuros. Estas tecnologías tienen como objetivo aumentar la eficiencia de las transacciones financieras, reducir costos e incrementar la seguridad de los datos para satisfacer las crecientes necesidades de las instituciones financieras. En resumen, el estudio revela un cambio en el uso de CBDC por parte de las instituciones financieras globales y cómo se dirigen hacia otros métodos de pago digitales, lo que refleja los cambios dinámicos en el sector de la tecnología financiera y las tendencias futuras.