En su última presentación pública, la vicepresidenta de EE.UU., Harris, presentó su nueva propuesta sobre el impuesto sobre ganancias capitalizadas. Según este plan, para aquellos individuos que ganen más de un millón de dólares al año, el impuesto sobre las ganancias capitalizadas aumentará a un 28%. Este enfoque tiene como objetivo incrementar la carga impositiva de los individuos con altos ingresos, con el fin de reforzar la redistribución de la riqueza y promover la justicia social. Harris destacó que esta medida ayudará a reducir la desigualdad económica, proporcionando fondos públicos adicionales para áreas clave como la educación, la atención médica y los servicios sociales.