La Policía Federal Brasileña llevó a cabo una operación especial llamada 'Niflheim' recientemente para combatir la lavado de dinero a través de criptomonedas. La operación se centró en tres organizaciones criminales principales y los agentes lograron congelar y secuestrar activos por un valor de aproximadamente $1.58 billones. Desde que se inició la investigación en 2021, estas organizaciones han sido acusadas de lavar $9.7 billones, la mayoría de los cuales provienen de actividades de contrabando y el tráfico de drogas. Esta amplia operación policial no sólo reveló el uso generalizado de las criptomonedas en transacciones ilegales, sino que también generó una profunda reflexión y discusión sobre las políticas de regulación de criptomonedas a nivel global.